Mierda. soltó Billie. Nuevamente, era la mañana y se encontraba terminando su desayuno mientras Adrienne y sus hijos ya no estaban.
Mariel lo miró extrañada.
No me di cuenta que era jueves ayer entonces no avisé nada a Mike, Tré y Jason. explicó. Mejor voy a llamarlos antes de que hagan planes. dijo. Bueno… Tré no creo que pueda planear mucho estando casado…
Ella rió y él sacudió la cabeza y la miró, cómo volviendo al mundo desde sus pensamientos.
Cómo sea, mejor me voy a llamarlos.
Buena idea. acotó con gracia.
A continuación, Billie se paró y se fue al living, a llamarlos tirado en el sillón, mientras que Mariel, se quedó en la cocina limpiando.
Buenas noticias. dijo cómo una hora más tarde, entrando en la habitación de ella, había ido a acostarse un rato, puesto que no tenía nada que hacer y que en la noche no dormiría mucho.
Mariel lo miró, demostrándole que tenía toda su atención.
Esta noche, ¡fiesta! exclamó haciéndola reír.
Él sonrió.
Sabes… comenzó, mirando hacia cualquier lado. El día está muy aburrido… agregó luego de una pausa. la casa muy sola… siguió en tono insinuante y mirándola. y la palabra… ‘‘fiesta’’, me dio una idea…
Mariel se sonrió.
Ya sé… dormir. Me parece una idea sumamente inteligente, además de innovadora. dijo ella y Billie sonrió.
No era dormir, en lo que pensaba, no exactamente, aunque… hay unos puntos en común entre ambas ideas. contestó él. La cama, por ejemplo. añadió y ella rió.
Idiota y sexópata. ¿Quién me mandó a trabajar contigo? inquirió, mirando al techo, cómo dirigiendo sus pensamientos en voz alta a un ser celestial.
¿Y desde cuándo eso te desagrada? preguntó luego de soltar una risa.
Emm… déjame pensar… soltó pensativa. Creo que desde… ¡si!, desde nunca. respondió al fin, sacándole otra risa.
Bueno, en fin, cómo dice el dicho… comenzó a decir. Menos charla y más acción. dijo y se tiró a la cama junto a ella, que antes de recibir el beso, rió.
Pasaron varias horas tirados en la cama hasta que se dieron cuenta que Adrienne llegaría en cualquier momento, entonces se pararon y dirigieron a diferentes puntos de la casa. Mariel se internó en la cocina a hacer de cuenta que limpiaba, (ya que había terminado con la limpieza en la mañana) y Billie se marchó al sótano, a tocar la guitarra.
Adrienne conversó un rato con Mariel, luego se fue al estudio, dónde distrajo a Billie (muy a su pesar) un buen rato.
La hora pasó y a eso de las siete, Mariel salió de la casa, en el auto de Billie a buscar a su amiga.
Para cuando terminó de anochecer, en la casa de los Armstrong se encontraban todos menos ambas amigas. Los primeros en llegar habían sido Tré y Jason, que habían ido juntos. Luego había llegado Mike, y por último, la amiga de Adrienne, Kate.
¿Hola? atendió Mariel su celular, para ese momento, ya había intercambiado número con Billie Joe.
Hola, ¿dónde estás? inquirió él del otro lado.
Esperando a An… creo que ya llegó. En cinco te llamo. dijo y colgó.
¿Andrea? preguntó a la chica de cabello castaño que acababa de bajar del taxi.
Ella se volteó y los ojos de ambas se abrieron más de la cuenta, denotando toda la emoción que sentían.
¡Mariel! exclamó y corrió a abrazarla.
¡Tanto tiempo! dijeron ambas mientras se sacudían un tanto en un estrecho abrazo.
¡Dios mío!, ¡Mírate! soltó Mariel. ¡Estás tan cambiada!
¡Tu igual! respondió riendo, al igual que su amiga.
Bueno, no esperan, ¿vamos? inquirió tratando de dejar a raya la emoción que sentía, aunque sin mucho éxito, la sonrisa de su rostro era casi imborrable.
Claro. contestó Andrea, en una situación similar a Mariel.
Luego, Mariel le indicó a su amiga cuál era su vehículo y ambas subieron.
¿Quieres decirme cómo hiciste que tu jefe te permita estar en la reunión e invitarme? inquirió Andrea.
De hecho, cuando escuchó que iría contigo a algún lado y le conté un resumen de nuestra historia, él sugirió de invitarte. Cómo sabía que no querría… sugirió hacer una reunión. contó Mariel.
Oh Dios… soltó Andrea, tapándose la boca (que tenía bien abierta con sorpresa, al igual que sus ojos) con las manos.
¿Qué? preguntó Mariel, también con los ojos bien abiertos.
¡Te acuestas con tu jefe! exclamó y Mariel abrió aún más los ojos.
¿QUÉ?, ¡claro que no! se defendió y soltó una leve risa.
¡Vamos!, ningún jefe es así sin motivo aparente. respondió. ¿O es un cuarentón verde? preguntó luego haciéndole gracia a su amiga.
No, sólo es así. Además, ¡ama la fiesta!, sospecho que organizó esto más para beber cerveza hasta perder la conciencia que para que me junte contigo. Ah, y creo que tiene treinta o treinta y uno.
Di lo que quieras, pero no te creeré. dijo Andrea, cruzándose de brazos y Mariel volvió a reír.
Siguieron conversando de cualquier cosa un momento hasta que fueron interrumpidas por el celular de Mariel.
¡Cierto!, ¡debía llamar a Billie! exclamó y se golpeó la frente con una mano, causándole gracia a su acompañante.
¡Ayy, no tenemos nada pero lo llamo Billy! se burló con una leve risa.
No es una abreviación, se llama Billie. dijo Mariel y Andrea la miró extrañada. Billie, lo siento, olvidé llamar. habló luego ya con el celular en su oreja.
No importa, ¿dónde están? preguntó.
En la puerta. contestó y soltó una pequeña risa.
Billie rió igual.
Bien, ya salgo a abrirles entonces. dijo y colgó.
Llegamos. anunció Mariel a su amiga luego de cortar la comunicación.
Wow. solo pudo decir ella.
Eso porque todavía no viste quiénes estarán en la reunión. soltó Mariel y bajó del auto que acababa de estacionar frente a la casa.
Andrea se giró a mirarla, pero al verla cerrando la puerta del vehículo, tuvo que contenerse de preguntar y la imitó también saliendo del auto.
Hasta que llegaron. se quejó Billie a la vez que se acercaba a las chicas en medio del patio delantero. Tu debes ser la tan famosa Andrea. agregó con una sonrisa. Yo soy Billie Joe, ¿todo bien?
Si… genial, ¿y tu? respondió ella, cómo distraída.
Me alegro, yo igual, bueno… pasen… invitó luego y comenzó a caminar delante de ellas.
Ahora si te creo lo de la fiesta… dijo en un susurro, Mariel rió en silencio. ¿¡Por qué no me dijiste que trabajas para Billie Joe Armstrong!? inquirió luego, y ella volvió a reír.
Porque sino no tendría sentido la sorpresa. contestó e ingreso a la casa, con Andrea detrás.
Ya adentro, Mariel presentó a todos a Andrea, y Adrienne a las dos a Kate. Luego, Tré y Mike salieron a comprar pizza y cerveza, mientras que los demás conversaban en el living. Una vez que regresaron, bajaron todos a sala de ensayos a comer y beber, ya que era el cuarto más cómodo de la casa para reuniones de ese tipo
¿Hola? inquirió Kate, ya era casi la una y su celular había comenzado a sonar. Minutos después, colgó.
¿Pasó algo? preguntó Adrienne al ver la expresión de su amiga.
Debo irme, Sam está con vómitos, John lo está por llevar al hospital. explicó.
Te acompaño a la puerta. contestó afligida.
Gracias.
Luego de despedir a su amiga, Adrienne regresó con los demás, caminó directo a su esposo y se sentó a su lado, comenzando a besarlo de tanto en tanto, y cada vez más seguido; finalmente, él se puso de pie y miró a sus amigos.
¿Tocamos un momento? invitó, ellos sin emitir palabra, accedieron.
Pasaron un buen rato tocando, y Billie Joe no hizo cantar a Mariel sólo porque estaba con su amiga, entonces decidió tener piedad.
Cariño. llamó Adrienne en una pausa, él le dedicó una mirada, demostrándole toda su atención. Me voy a acostar; tengo mucho sueño y no quiero interrumpir. informó. Billie le sonrió afectuosamente.
Que descanses. saludó luego de acercarse a besarla.
Diviértete, te amo. dijo ella, a continuación, saludó al resto con un gesto con su mano, y se retiró a descansar.
Después de que Adrienne se retirara, solo tocaron un momento más y luego se dedicaron exclusivamente a beber y conversar, hasta que a finalmente, cerca de las 4:30, Jason y Tré estaban casi desmayados de tanto alcohol.
Mike y Billie se encontraban en un estado bastante mejor que los otros dos, aunque no paraban de reír y cantar. Mientras, Andrea y Mariel los observaban divertidas.
Bien. He visto toda la noche cómo lo miras. Tus ojos no lucían así desde los 13, cuando te enamoraste de tu vecino. reclamó Andrea. Mariel la miró con sorpresa. No te hagas la que no sabes de qué hablo.
Bien, si, tienes razón. admitió luego de exhalar un suspiro de resignación. Si había alguien a quién no podía mentirle, era a ella.
Lo sabía. dijo con una sonrisa de victoria.
Igualmente, la idea de la reunión nada tiene que ver con eso. se defendió Mariel.
Espera… soltó de golpe. Ella la miró con el entrecejo fruncido.
¿Qué? inquirió extrañada.
Dime que no te acostaste con él. pidió Andrea. Mariel torció un poco la boca. Oh, mierda.
Lo sé, lo sé. Pero, no pude evitarlo.
Su amiga suspiró.
¿Él lo hace por calentura o…?
No lo sé. A veces da la impresión que siente cosas por mi… Pero aún no ha dicho más que qué tiene un lío en la cabeza.
Andrea torció una mueca y asintió, en seña de comprensión.
Tengo una idea. soltó Mariel luego de ver como Tré caía dormido en el sofá. Yo me quedo con Billie y te dejo sola con Mike. sugirió y Andrea la miró con los ojos bien abiertos, como si hubiese dicho una locura. ¡Ay, vamos!, ¡no vas a decirme que no te agrada la idea! reprochó entonces, haciéndola reír.
Bueno, quizás, pero ¡quieres que me le tire ¿o qué mierda?! se defendió ella.
Déjamelo a mi. dijo Mariel y sin más, se puso de pie.
¡Hey! ¿qué haces?, ¡ven aquí! exclamó Andrea, pero Mariel no hizo caso.
Oye, Bill… dijo alejándolo un poco de Mike, mientras su amiga se debatía entre ir a callarla, o esperar sentada a ver qué sucedía. ¿Por qué no le sugieres a Mike que se acerque a Andrea, y mientras nos vamos a mi habitación? ofreció.
Mmm… me gusta como piensas. soltó Billie. ¿Ella no tiene problema? preguntó luego.
Si lo tuviera, no estaría aquí. respondió Mariel y tras sonreírle, volvió con su amiga. Listo. dijo ni bien volvió a sentarse junto a ella.
¿Qué hiciste? inquirió Andrea con cara de susto.
Mariel simplemente sonrió y le dijo que nada. En ese momento, ambas pudieron ver cómo Billie se acercaba a Mike, le dijo unas cosas y luego miraron hacia ellas.
Te juro que si viene hacia aquí, tendré que volver a mi país como prófuga de la ley. advirtió. Mariel rió.
¡Vamos!,¡no seas exagerada! exclamó con gracia.
Justo cuando Andrea estuvo por contestar, Mike apareció junto a ellas.
Así que eres de México. dijo sentándose a su lado, Mariel tuvo que reprimir una risa.
Ajam… contestó. Andrea con algo de molestia en la voz, y dirigiéndole una mirada de odio a Mariel. Y tu de… aquí. agregó. Mike rió.
Bueno chicos, creo que. Los dejo solos un momento. interrumpió a Mike, quien estaba por decir que si.
Claro, nos vemos luego. dijo el bajista, que innegablemente, había bebido de más.
Al otro día, todos (menos
Billie) despertaron temprano, Adrienne llevó a Jake y Joey al colegio mientras
Mariel se quedó en la casa limpiando lo que desayunaron y hablando con Billie
que recién terminaba su desayuno.
¿Al final qué harás con tu
amiga? inquirió.
Ella suspiró.
No lo sé…
Hablé anoche con Adrienne y
me dijo que no tiene problema, hasta se entusiasmó. Hace tiempo que no traemos
gente para tomar, comer pizza y pasarla bien un rato. interrumpió él.
Mariel volvió a suspirar.
Bien, le diré. cedió al fin y le sonrió.
Dile del viernes, así llevo
a Jake y Joey a la casa de mi madre a dormir.
Bien.
¿Segura que tu amiga quería
quedarse con Mike? inquirió Billie
a Mariel.
Claro, pero no lo admitirá.
él la miró con una ceja alzada y ella
rió. De verdad, la conozco, mañana
me lo agradecerá.
No se ve muy contenta… pero
si tu lo dices. dijo y luego de
dirigirles una última mirada, se volvió hacia Mariel. ¿Y bien…?
Ella sonrió.
¿Quieres poner alguna excusa
y subimos? preguntó y Billie se
alejó hacia Tré y Jason. ¡Mariel!
llamó. ¿No me ayudas a hacerlos subir a la habitación de huéspedes? inquirió en voz alta, para que Mike oyera.
Claro. asintió ella y ayudó a despertar a Jason lo
suficiente como para que se pusiera de pie.
Creo que mejor tu ayudas a
Tré que está un poco mejor que Jason. dijo
Billie e hicieron cambio.
Cómo pudieron, a paso torpe
y casi matándose más de una vez en cada escalera, lograron subir a ambos
músicos a la habitación de huéspedes.
Última vez que ayudo a subir
a uno de tus amigos ebrios. dijo
Mariel luego de un gran suspiro, y se arrojó a un sillón de la sala.
Todo sea por un rato a
solas. soltó Billie y se apoyó con
las manos en el sofá, una a cada lado de su cabeza, y se acercó a ella para
besarla.
En eso coincido. respondió con una sonrisa y lo besó.
¿Tu dices que esos dos
tendrán acción? inquirió él,
separándose un poco.
Mariel volteó y pensó un
poco.
Mmm, no lo sé. Espero.
dijo, volvió a voltear y lo besó en los
labios, luego bajó al cuello y empezó a acariciarle el pecho con las manos.
Creo que mejor vamos a tu
habitación. soltó costosamente, y
ella, tras una sonrisa, asintió.
Está.súper.mal.cortado,lo.sé,y.tardé.un.montón.y.es.re.corto,pero.no.saben.lo.que.me.costó.escribir.eso.con.éste.teclado\:,de.verdad.que.la.intención.era.subir.mucho.antes,sorry:(
Lo.parto.en.dos.el.cap.para.subir.aunque.sea.ALGO,trataré.de.ver.si.puedo.escribir.más.rápido.lo.que.falta,encima.que.son.más.de.relleno.las.boludeces.de.el.cap,e.e,ajksskkdd
